viernes, 20 de junio de 2008

Death Proof

Tarantino lo volvió a hacer. Cada vez que Quentin toma la dirección de una película parece estar asegurado el entretenimiento. El año pasado se estrenó en Hungría Death Proof, el último largometraje del director de cintas como Kill Bill 1 y 2, Perros de reserva y Pulp Fiction, por mencionar algunas. A México llegó hasta hace poco.

La historia gira alrededor de Stuntman Mike (Kurt Russell) quien tiene un pasatiempo macabro: asesinar mujeres con su auto, el cual está diseñado a prueba de muerte.

La película se divide en dos partes muy bien diferenciadas. En la primera, un grupo de amigas encabezado por Jungle Julia (Sydney Tamiia Poitier) planean un weekend en la casa de campo del padre de una de ellas. El único requisito es hacerlo sin hombres. Antes de arribar a su destino llegan a una taberna del pueblo. Allí beberán un rato --de la mano de Tarantino, quien además de dirigir, actúa-- y conocerán al psicópata Stuntman Mike. El resto es imposible decirlo o contaré el final de la primera parte.

Otras chicas, voluptuosas como las anteriores, están a punto de recoger a su amiga australiana, Zoe Bell, quien actúa como ella misma. Su papel es el de doble, como en la vida real (ha doblado a Uma Thurman en Kill Bill, y ha aparecido en la serie de televisión "Lost"). Mientras sus amigas se detienen en un minisúper a comprar agua y otras cosas, Stuntman Mike se percata de su existencia. Al buscar un auto que vieron anunciado en el periódico, deciden realizar las acrobacias que llevan a cabo como dobles, tanto Zoe como Abernathy (Rosario Dawson). Mientras se divertían aparece Stuntman Mike siguiéndolas en su auto y divirtiéndose con ellas. El resto, como en la primera parte, lo dejo para que lo gocen.
El filme no exige una concentración demencial. Sólo pide que te sientes en la sala a pasar un buen rato (eso sí, has de estar acostumbrado al humor de Tarantino). Pienso que es la película más gore que ha realizado, donde la brutalidad y realismo de las escenas estremecen las vísceras.

Otra de las delicias de esta cinta es que fue grabada como si fuera de los años setenta, aunque retrata claramente el presente. Los cortes "accidentales", la "mala calidad" del celuloide, los cambios "abruptos" de color a blanco y negro y el sonido son fenomenales. La escena de la cantina es una de mis favoritas.

Además de por lo dicho, Tarantino se caracteriza por los excelentes soundtracks de sus películas. El presente es exquisito; un verdadero deleito que corrí a buscarlo a la tienda de música. Me encontré no sólo con el CD, sino también con el DVD. Genial.

Es divertida, hilarante, estresante, impactante y llena de humor. Una alta recomendación. Death Proof se convertirá en otra película de culto dirigida por el director estadounidense. Un definitivo, contundente y unánime 3.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pues ya esta preparando otra, y esta de nazis, ya veremos si acierta.